sábado, 7 de agosto de 2010

Un ejercicio de Literatura.

Y un día me despierto, me levanto, remojo esta áspera piel y saludo al extraño que esta detrás del reflejo.
que curioso..
se ve grande, cansado, con arrugas, ojeras de desvelos, barba que pide ser cortada y ojos brillosos que piden vivir..
Se inspecciona, minuciosamente, como si no fuese su cuerpo, se palpa cada cicatriz que el tiempo le ah dado.
mira su cuerpo cansado, y no entiende porque esta tan cansado.
El reflejo se moja, se empapa, mas allá de agua, de esperanza.
De esperanza  de no ser el un día mas aquel que se saluda.
Se seca las lagrimas y el agua que escurre.
Abre el grifo, abre sus manos y cierra sus ojos....

Vaya.. parece que hacerlo, con el tiempo, se hace cada vez mas fácil. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario